En lo que va del año, en Pilar se registraron al menos 1500 despidos, solo para mencionar los que se dan en grandes empresas.
El cierre sorpresivo de la planta de la empresa de electrodomésticos Whirlpool de Pilar, con el despido de 220 trabajadores, se suma a otras situaciones igual de complejas que se viven en otras plantas del corredor industrial de Pilar, tanto en el predio fabril como en el corredor de la rutas 25.
Por ejemplo, un relevamiento de DIB expuso que a mediados de junio, la multinacional Kimberly-Clark, que producía toallitas húmedas y protectores diarios para marcas como Huggies, cerró sin previo aviso su planta y trasladó la actividad a su establecimiento en San Luis. En total, fueron despedidos 220 trabajadores, que negociaron una indemnización y el pago durante seis meses de los aportes a la obra social.
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Lo mismo ocurrió con la multinacional Kenvue -ex Johnson & Johnson, propietaria de marcas de consumo masivo como Siempre Libre, Carefree, Johnson’s Baby y Listerine, que dejó de fabricar productos en su planta de Fátima.
No sólo cesanteó a 130 sino que anunció la importación de productos desde Brasil. Esta compañía de productos de higiene femenina supo tener 1600 operarios años atrás y hoy quedaron alrededor de 30.
Otro conflicto que aún continúa es el de la fábrica de Porcelanatos ILVA, que hace tres meses cerró también sorpresivamente sus puertas y dejó a 300 familias en la calle.
De hecho, los ex empleados aún luchan para que la empresa, que también adujo que importará producción desde el exterior, le pague las indemnizaciones.
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El conflicto con ILVA, fundada por la familia Zanon y con más de 30 años en el rubro, se profundizó luego de que la empresa presentara en la Justicia comercial una propuesta para reabrir la planta con apenas 40 empleados seleccionados por la propia firma, en un esquema que elimina derechos adquiridos y reduce salarios y beneficios, recordó DIB.
A los días de que se conociera el cierre de ILVA, otra compañía decidió bajar la persiana también en Pilar: se trató de Magnera, una firma de Estados Unidos especializada en insumos industriales, que dejó de funcionar y cesanteó en el año a unas 160 personas. Se trata de una de las principales proveedoras de insumos para fábricas de pañales y toallitas higiénicas.
A los despidos ya mencionados se dan otros por goteo, o incluso en empresas donde se adelantan vacaciones y se suspende personal, y otras que pagan sus salarios en cuotas. Allí aparecen FV, Akapol (pegamentos), FARA (ladrillos) laboratorios Sidus, o la avícola Tres Arroyos, que desde hace casi un año paga los salarios en tres y hasta cuatro cuotas.
Con información de DIB