El presidente Javier Milei anunció este sábado en la 137° Exposición Rural de Palermo la reducción de las retenciones de manera “permanente” a varios productos del campo, incluyendo carnes y también granos, tras una fuerte expectativa por parte del sector.
De acuerdo a lo que enumeró, desde hoy los porcentajes quedan de la siguiente manera: “A la carne aviar y vacuna se reducirán del 6,75% al 5%, al maíz del 12% a 9,5%, al sorgo de 12% a 9,5%, al girasol del 7,5% al 5,5%, a la soja del 33% al 26%, y a los subproductos de soja del 31% al 24,5%”.
“De la catarata de problemas, sólo queda el yunque más pesado. Las retenciones. Por eso quiero hacer un importante anuncio sobre este gran flagelo que nunca debería haber existido”, dijo el libertario antes de confirmar las cifras.
En tanto, aseguró que estas bajas “redundan en una reducción de retenciones de las alícuotas para las cadenas de granos del 20%; y en una reducción de retenciones a la cadena de ganado y carnes del 26%”. Tras ello, confirmó que las reducciones serán “permanentes” y no transitorias.
“Buscamos dar impulso al campo, fuertemente castigado por estos impuestos en los últimos 20 años. Repito, estas reducciones son permanentes y no tendrán vuelta atrás mientras yo esté en el gobierno. Eliminar las retenciones es una obsesión para nuestra gestión y hemos hecho muchos avances en esa dirección”, insistió el Presidente, quien luego agregó: “Es importante tener presente que esto es únicamente gracias al superávit fiscal que hemos conseguido, que lo cuidamos como agua en el desierto ante los embates sistemáticos de la casta política”.
Minutos más tarde, desde la Oficina de Presidencia emitieron un comunicado sobre el anuncio. “El campo argentino, columna vertebral de nuestra economía, ha sido una de las principales víctimas de las políticas implementadas durante décadas por la casta política empobrecedora que sostuvo su modelo económico basado en el robo sistemático del fruto del trabajo ajeno. Y no lo hizo solamente con las retenciones, también lo hizo con otros cepos cambiarios, múltiples tipos de cambio, tasas desproporcionadas, excesiva burocracia e incrementos continuos de impuestos; todas prácticas eliminadas por este gobierno”, dice el escrito.
“El gran campo argentino tiene en el presidente Milei un aliado que lo ve como el motor de crecimiento del país, y no como una caja para saquear y hacer política. Este gobierno confía en su potencial para continuar sirviendo a la Patria, cultivando nuestras tierras y posicionándose como líderes del sector en el mundo”, cierra.
El discurso de Nicolás Pino
El primero en hablar este sábado en el acto en Palermo fue el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, quierealizó una crítica a la continuidad de las retenciones. Destacó, en resumen, que no solo daña a los productores, sino a la sociedad como país debido a que son un obstáculo que paraliza al sector y no le permite expresar su potencial.
“Mientras hacíamos el discurso debatimos si íbamos a hablar en tono pesimista u optimista, pero decidimos que íbamos a ser realistas. Tenemos que reconocer los avances que ha habido en el país desde el año pasado y lo que falta por hacer, pero sabemos a dónde no queremos volver”, expresó y se volteó para mirar al Presidente, quien le sonrió.
Y siguió: “Si tuviéramos las condiciones adecuadas, podríamos producir el doble de lo que hacemos. La función del Estado no es ni reemplazar ni trabar nuestra actividad, debe generar condiciones que permitan la producción. Los argentinos no podemos perder otra oportunidad. ¿Cuáles son las condiciones que pedimos? Que se continúe reduciendo la carga impositiva, para liberar nuestra capacidad productiva. Esto incluye, ante todo, eliminar las retenciones. Pero también eliminar las superposiciones impositivas. Un caso importante es el impuesto a los ingresos brutos establecido por algunas provincias, cuyo peso monetario es tal que en algunos casos iguala o supera al de las retenciones”.
En otro tramo de su alocución, Pino habló de Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), recientemente reestructurada por el Gobierno a través de cambios en el directorio y la apertura de retiros voluntarios: “Debe seguir existiendo. Debe dedicarse a la investigación y al desarrollo al servicio de los productores; seguir trabajando en el campo de la biotecnología y continuar desarrollando nuestras herramientas, adaptando las tradicionales y dando acceso a las nuevas, incluidas la inteligencia artificial y la robótica”. (DIB)