En un encuentro con más de 200 directivos, representantes y propietarios de colegios bonaerenses reclamaron a las autoridades provinciales una “urgente respuesta” a los pedidos de ayuda financiera y ampliación de subsidios para afrontar la difícil situación del sistema de educación privada.
El planteo quedó plasmado en un documento que se conoció luego del XXI encuentro anual de la Asociación de Instituciones Educativas Privadas de Buenos Aires (AIEPBA) y la Junta Nacional de Educación Privada (JUNEP) realizado este jueves y viernes en Mar del Plata.
Bajo la consigna “Educación: entre el legado y la innovación”, se desarrollaron jornadas de debates con expertos y académicos sobre cuestiones pedagógicas, de gestión educativa y de funcionamiento institucional en un hotel de la ciudad balnearia.
Con la presencia de la presidenta de AIEPBA, Marina Bermúdez, representantes de asociaciones de todo el país, del presidente de la CAME, Alfredo González y autoridades educativas del distrito de General Pueyrredón, el Congreso XXI se inauguró con una charla magistral sobre diversos temas vinculados con la educación y la gestión de instituciones educativas.
Asistieron como invitados, el ex ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Lino Barañao, las especialistas, Claudia Romero, Graciela Krichesky, Mariela Karp y Rebeca Anijovich.
En las exposiciones y en las conclusiones los directivos de institutos reiteraron su preocupación por la crisis financiera que atraviesa el sector y que ya provocó el cierre de un centro educativo en Avellaneda y otro en Mar del Plata, según se expuso.
Además, Aiepba planteó que se han elevado ante la Dirección General de Escuelas más de 1.000 pedidos de incorporación de establecimientos o secciones para recibir subsidios que permitan afrontar porcentajes en el pago de los haberes de los equipos docentes.
“Hay al menos una decena de pedidos de instituciones marplatenses que necesitan obtener subsidios para seguir funcionando”, admitió el secretario ejecutivo de AIEPBA, Martín Zurita.
Además las autoridades de esa institución que agrupa a más de 2.300 centros educativos privados de la provincia, expresaron su profunda preocupación por los casos de establecimientos que deben cerrar sus puertas en el ciclo lectivo 2024 y que han motivado, también, la realización de actividades de pedido de auxilio en las respectivas educativas.
Hace más de un mes, AIEPBA advirtió sobre la crítica situación que atravesaban por lo menos 30 colegios a los que los problemas económicos los ponía al borde del cierre. La entidad hizo entonces un pedido formal al Gobierno provincial pero no hubo respuesta.
Los colegios de manera individual tampoco obtienen respuestas. Por eso la Nueva Escuela Spegazzini, ubicada en Ezeiza organizó una comisión de padres y decidieron realizar un "abrazo simbólico" al edificio escolar ubicado en Pampa de Achala al 900 de ese distrito del sur del conurbano.
También hicieron lo propio en el colegio Vicente Saperi, de Monte Grande. Allí los directivos decidieron hacer un "llamado solidario a la comunidad" para tratar de salvar el funcionamiento de la institución.
AIEPBA lo advirtió y ante la os colegios buscan de manera desesperada ayuda para sostener los servicios educativos en las comunidades donde están arraigados y han construido una relación de prestigio y confianza con padres y alumnos.