Imprimir esta página
Malena Galmarini hizo un balance a un año de asumir la presidencia de AySA
Lunes, 14 Diciembre 2020 17:41

Malena Galmarini hizo un balance a un año de asumir la presidencia de AySA

La titular de la empresa destacó la "fuerte inversión utilizando nuevas tecnologías, con una mirada más social, con perspectiva de género y ambiental”. "Estoy convencida de que este es el camino para poner a la Argentina de pie", mencionó.

La presidenta de Agua y Saneamientos Argentinos (AySA), Malena Galmarini, cumplió 1 año siendo la primera presidenta mujer en conducir la empresa prestadora del servicio de agua potable y desagües cloacales de la Ciudad de Buenos Aires y 26 partidos de la Provincia de Buenos Aires.

En un balance sobre ese tiempo transcurrido en la gestión, destacó la "fuerte inversión utilizando nuevas tecnologías, con una mirada más social y con perspectiva de género y ambiental".

También destacó "el apoyo al sector de agua y saneamiento brindado por el presidente Alberto Fernández y el Ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis" como "fundamental".

“Durante este primer año lo primero que hicimos fue acomodar la empresa, pagando las deudas que tenía y reactivando 90 obras que estaban paralizadas. Actualmente la empresa cuenta con 541 obras en distintas etapas. Nuestro principal objetivo consistió en encontrar la forma de llegar a más barrios, no sólo para mantener los estándares del servicio que ya teníamos, sino también para que más personas pudieran acceder a un derecho humano tan esencial. Fue importantísimo reconocer la mirada social que debía tener AySA”, explicó Galmarini.

En el área de concesión de AySA se localizan 1151 barrios populares. A partir de la factibilidad técnica y en función de lo previsto en el Plan Director, se identificó la posibilidad de avanzar con la realización de más de 700 proyectos de agua y cloaca que alcanzarían a más de 400 barrios.

Con ese objetivo, Malena Galmarini, junto con el Ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, Agustín Simone, Ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires y Jaime Perzcyk, Secretario de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, presentaron a intendentes e intendentas de la Provincia el plan para brindar acceso sustentable a los servicios de agua potable y saneamiento a los habitantes de los Barrios Populares.

“Nos parecía que ya era tiempo de meternos en un área que la empresa nunca había llevado adelante: la de los vecinos y vecinas de los barrios vulnerables, que también son usuarios y usuarias de AySA. Por lo tanto tenemos la obligación no solo legal y jurídica, sino ética y moral, de llegar a aquellos lugares donde todavía el Estado con este servicio no llegó. Esto no es un trabajo que podamos hacer ni una sola persona, ni una sola empresa. Es un trabajo que hay que hacer entre todas y entre todos. Tenemos que trabajar juntos, unidos, tomados de la mano, sin importar de qué jurisdicción soy, sin importar de qué nivel del estado soy, sin importar de qué partido político soy, todos juntos, por aquellos que más sufren”, señaló Malena Galmarini.

Además de estas obras que traen importantes mejoras en cada barrio, la empresa continúa avanzando en las mega obras Sistema Riachuelo, Sistema Agua Sur, la Planta de Tratamiento de Barros en la Planta Depuradora Sudoeste y la ampliación de la Planta Depuradora, que van a beneficiar a una población aproximada de 7.000.000 habitantes.

A través de Planes como Agua + Trabajo y Cloaca + Trabajo, AySA genera puestos de trabajo a través de cooperativas y revaloriza la mano de obra con la formación técnica. A todo esto, Galmarini le sumó un adicional: el de buscar la perspectiva de género y la paridad en la conformación de los equipos de trabajo.

De esta forma, AySA continúa con la incorporación de prácticas en pos de reducir la brecha de género y garantizar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.

“Muchas de nuestras obras son llevadas adelante por cooperativas conformadas íntegramente por mujeres. Hay mujeres haciendo el oficio, que no es un dato menor. Muchas veces son incorporadas a la obra pública en los roles tradicionales, y aquí en cambio son parte de la construcción de las obras”, expresó Galmarini.

Al inicio de su gestión, la presidenta de AySA lanzó una Política de Género que promueve tanto la prevención, como el tratamiento, gestión y respuesta adecuada y oportuna de la empresa frente a las denuncias que pudieran presentarse ante situaciones de acoso y violencia laboral. En consecuencia, se generaron Protocolos de prevención e intervención en situaciones de acoso y violencia laboral; y en situaciones de violencia doméstica para las personas trabajadoras de la empresa.

Actualmente, se llevan adelante capacitaciones en materia de género para todas las trabajadoras y trabajadores de la empresa, con el objetivo de reflexionar, profundizar y reconocer la violencia de género en actitudes cotidianas, muchas veces invisibilizadas o naturalizadas.

Se creó, además, una Guía para el uso no sexista de la lengua, con el objetivo de reflexionar sobre el poder del lenguaje y la responsabilidad que tenemos de usarlo de modo que auspicie y promueva la inclusión. “Lo que no se nombra, no existe. Si las mujeres no somos parte del lenguaje cotidiano, pasamos a no ser visibles”, señaló Galmarini.

En este contexto de pandemia, la empresa impulsó que las licencias de cuidados se implementen de forma compartida, con el objetivo de desarticular el hecho "natural” de que sea la mujer quien debe responsabilizarse por las tareas de cuidado.

También se realizaron operativos preventivos con el objetivo de dotar de elementos de salud e higiene a la población de los barrios populares de CABA y los 26 municipios del área de la concesión de AySA para reducir los riesgos de la pandemia. Y si bien AySA no tiene jurisdicción técnica dentro de la red interna al Barrio 31 -cuya responsabilidad es del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires-, la empresa también asistió con el envío de camiones cisternas.

“Con el propósito de brindar acompañamiento ante la situación de emergencia sanitaria y aislamiento obligatorio, gestionamos el envío de lavandina y agua potable a barrios vulnerables. No importa si es el Estado municipal, provincial o nacional: lo importante es que quienes la están pasando mal sientan que hay un Estado presente. Cuanto más problemas tengamos, más Estado necesitamos”, destacó Galmarini.

Además, se implementó un servicio de agua potable para los isleños y las isleñas del Delta. En el período que va de marzo a octubre, se entregaron 2 millones de litros de agua potable en la Primera y Segunda Sección isleña. Esto equivale a un promedio mensual de 4 mil familias, a las que se abastecen con cuatro embarcaciones.

Ante el desafío y la responsabilidad de hacer vigilancia medioambiental y epidemiológica, la empresa desarrolló una innovadora metodología de alerta temprana y vigilancia de los líquidos cloacales, que les permitió encontrar rastros genéticos de COVID-19 antes de que sean devueltos al río. El Ministerio de salud avaló, luego de analizar los resultados obtenidos, que AySA continúe con las fases de desarrollo e implementación de la técnica. El innovador desarrollo realizado por los laboratorios de la empresa, se encuentra a la altura de estudios similares realizados en España y Holanda.

Con el objetivo de acompañar a las familias en esta nueva realidad en la que estudiar desde las casas es un desafío, se lanzó la plataforma web y educativa “Lo bueno del Agua”, que permite trabajar en los distintos niveles de la educación obligatoria, desde el inicial hasta el superior, una temática multidisciplinaria –en la biología, matemática, física, historia-, que nos permita el cuidado de los recursos escasos como es el agua, que se relaciona con el cuidado del ambiente.

En esa misma línea, la empresa lanzó el programa “Desafíos del Agua 2020” junto al Ministerio de Obras Públicas y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible. El programa significó una fuerte alianza estratégica entre el sector público y privado, trabajando junto a ARSAT y ENACOM en gestión asociada con las empresas privadas como Telefónica, Telecom y Claro; y las grandes tecnológicas como Google, Microsoft y SAP. Se trató de una iniciativa de Enlace AySA, el Hub de Innovación de Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) que buscó fortalecer la relación entre jóvenes, personas emprendedoras, investigadoras e investigadores, organismos públicos y empresas para pensar y desarrollar soluciones digitales para los principales desafíos del agua y el ambiente.

Con un nuevo impulso, Malena Galmarini relanzó ALOAS (Asociación Latinoamericana de Operadores de Agua y Saneamiento) como primera presidenta mujer de la asociación y formó parte de eventos internacionales como el World Economic Forum o la Conferencia “VI Diálogos del Agua” organizada por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Reino de España. “Esta crisis nos da una oportunidad para poner en la alta agenda de los Estados, servicios esenciales como el agua y el saneamiento”, remarcó.

"Nada de esto hubiera sido posible sin el acompañamiento de las trabajadoras y los trabajadores del S.G.B.A.T.O.S, liderado por el secretario general José Luis Lingeri, en cada desafío que la empresa tuvo que enfrentar. El 2020 ha sido un año muy difícil para la Argentina y el mundo", sostienen desde la empresa y enfatizan que " el lema de la gestión de Galmarini dice que cuando hay agua hay vida y que cuando existen derechos, estos deben ser satisfechos. El agua es un derecho humano impostergable y el rol de AySA en asegurar su acceso durante esta pandemia fue clave", completaron.

No Internet Connection